RELATO CORTO – SALA DE BAILE
SALA DE BAILE
La enorme sala de baile del castillo, aquella noche estaba repleta de invitados deseosos de diversión…
Cuerpos jóvenes -hombres y mujeres- con vestimentas de época se movían incansables a los acordes de un minué…
Lo único inusual, era que las hileras de espejos que cubrían las cuatro paredes del salón, estaban cubiertas de finas cortinas de terciopelo negro… Solo alguno de los cortinajes dejaba visible algún pequeño resquicio de aquellos bien cubiertos espejos… Lo divertido es que no devolvían imagen alguna…
Bram, absorto sobre las hojas de papel en las que solo había garabateado algunas palabras, salió de su ensimismamiento y entreabrió sus ojos. Allí no había nadie… Ni espejos, ni salón, ni músicos… Siquiera estaban los enigmáticos danzantes…
Entornó de nuevo sus ojos y la escena, absolutamente vívida, se hizo de nuevo real… Danzaban al son de la música y los pequeños espacios en los espejos seguían sin reflejar a los gozantes bailarines…
Bram repitió la operación varias veces con idénticos resultados… por fin, con cara de cabreo dijo: estoy hasta las pelotas y con la inspiración bajo mínimos… Creo que me olvidaré de la fiesta, sacaré al conde a nocturnear y que se la chupe a alguien de una puta vez… Así nació Drácula…